Algunos usuarios regresaron a sus lugares de origen luego de vacacionar en la capital o área conurbada, mientras que otros viajaron a las principales playas, pueblos mágicos y zonas turísticas del país.
A partir de las 3 de la mañana los pasajeros realizaron enormes filas para documentar equipaje en aerolíneas, principalmente de bajo costo y para ingresar a salas de última espera.
Ambas cadenas humanas impedían que se respetará el protocolo de sana distancia.
Durante un recorrido por la Terminal 1, se observó como la mayoría de la gente llegaba apresurada al aeropuerto capitalino para no perder su vuelo.
Para agilizar los trámites, personal de seguridad pública y privada pedían a los paseantes llenar el cuestionario anticovid a través de su teléfono celular, tener a la mano los pases de abordar, así como identificaciones.
En tanto, en la pista aérea había alrededor de 20 aviones, la mayoría de Volaris y Vivaerobus, preparados para despegar. También algunas aeronaves de United Airlines e Iberia esperaban su turno para volar.
